“Tenemos la fortuna de estar viviendo en una época de mucho crecimiento, de una enorme integración ya sólida entre Estados Unidos, Canadá y México. La oportunidad que tenemos precisamente con el nearshoring es extraordinaria”, dijo Hank en una reunión con medios.
El banquero destacó que, pese al discurso proteccionista del republicano que ha amenazado a México con imponer aranceles, estas tensiones podrán sortearse en un ambiente de diálogo.
“Creo que lo más importante a resaltar es que en México somos socios comerciales de Estados Unidos. Hemos siempre tenido una relación de negocios, de vecinos, somos vecinos que trabajamos, colaboramos juntos. Lo hemos hecho en el pasado con el propio presidente Trump y México sigue avanzando”, dijo.
Carlos Hank subrayó que ante la promesa del nearshoring, el banco está preparado para seguir prestando dinero a empresas, gobierno y personas, con el fin de capitalizar la oportunidad. “Creo que vienen años extraordinarios para México en ese sentido”, apuntó.
La búsqueda de Estados Unidos de reducir su dependencia de China, especialmente en sectores como el automotriz o la tecnología, es vista por el banco como una oportunidad para una mayor integración con México y Canadá.
Por esta razón, Hank enfatiza la importancia de que el tratado comercial ofrezca certeza y apoye a México en convertirse en un aliado más relevante de Estados Unidos en este nuevo paradigma del comercio internacional.
“Por eso es tan importante el tratado que se firme dé certeza y ayude a que justo en este cambio del paradigma que está dando en todo el comercio internacional México se vuelva todavía un aliado más importante de Estados Unidos”, destacó Alejandro Padilla, economista en jefe del banco.
El panorama de integración y colaboración entre estos países plantea, según el banco, un futuro prometedor al apoyar el desarrollo económico regional y fortalecer las relaciones comerciales que han sostenido hasta ahora el crecimiento compartido.