Crecimiento de 0.74% en industria mexicana

La producción industrial en México experimentó un aumento durante el tercer trimestre del año, alcanzando un incremento de 0.74% en comparación con el trimestre anterior. Este incremento se dio en un contexto de recuperación económica progresiva, gracias a una mayor demanda de productos manufacturados y a la estabilización del sector energético.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el crecimiento observado se atribuye principalmente a la expansión en las industrias manufactureras, que mostraron un aumento significativo. La industria automotriz y la de aparatos electrónicos fueron particularmente dinámicas, impulsadas por la recuperación de los mercados internacionales y el fortalecimiento de las cadenas de suministro.

Por otro lado, la producción en el sector minero mostró señales de mejora, aunque a un ritmo más moderado. Las políticas gubernamentales dirigidas a impulsar inversiones y modernizar la extracción de recursos minerales han contribuido a este repunte. Sin embargo, el sector enfrenta desafíos relacionados con la sostenibilidad y la regulación ambiental, que podrían afectar su crecimiento futuro.

El sector de la construcción también reportó un leve aumento, en parte debido a proyectos de infraestructura impulsados por el gobierno. Pese a esto, sigue enfrentando obstáculos relacionados con el acceso a financiamiento y la implementación de nuevas tecnologías.

Un especialista consultado comentó:

“El ritmo de crecimiento industrial es positivo, aunque moderado. Es crucial que las políticas gubernamentales continúen apoyando la inversión y la innovación para mantener esta tendencia al alza y fomentar un desarrollo más sostenible en todos los sectores productivos”.

Con estas cifras, se espera que la industria mantenga su trayectoria de recuperación en el último trimestre de 2023, siempre y cuando se logre estabilidad en factores externos como el comercio internacional y el precio del petróleo. Mientras tanto, los actores económicos permanecen atentos al comportamiento de las políticas monetarias globales y su impacto en la economía mexicana.