El Senado aprobó recientemente una reforma que elimina la autonomía del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), organismos clave en la regulación de la competencia en México. La decisión ha provocado una serie de reacciones en el ámbito político y económico, dado el impacto que podría tener en la dinámica del mercado nacional.
La reforma, impulsada por el partido en el poder, busca centralizar las decisiones sobre competencia económica en una nueva autoridad que estará bajo el control del Ejecutivo. Sus defensores argumentan que este cambio permitirá una mayor eficiencia en la toma de decisiones y reducirá la fragmentación burocrática.
No obstante, los críticos de la medida advierten que se corre el riesgo de comprometer la imparcialidad y la objetividad, al concentrar tanto poder en una sola entidad. La investigadora en economía María López comentó al respecto, señalando que uno de los principales riesgos es la posible politización de las decisiones que, hasta ahora, se tomaban con criterios técnicos.
“La independencia de estos organismos era una garantía de equidad en el mercado. Se corre el peligro de que esta centralización lleve a decisiones que favorezcan intereses políticos por encima de los económicos”, expresó López.
El sector empresarial también ha mostrado inquietud ante la reforma, pues podría desincentivar la inversión extranjera si se percibe una falta de garantías para la competencia justa. De hecho, varias cámaras empresariales han emitido comunicados en los que expresan su preocupación por el impacto que esta medida podría tener en la estabilidad económica.
Por otro lado, algunos expertos destacan que el éxito de esta nueva autoridad dependerá en gran medida de los perfiles que sean designados para dirigirla y del compromiso que muestren hacia una competencia leal y transparente.
En resumen, aunque la reforma fue aprobada con el argumento de mejorar la eficiencia, las dudas sobre su impacto real en la competitividad del mercado mexicano siguen generando un amplio debate entre diversos sectores del país.