El gobierno federal ha destinado un incremento significativo de recursos para la refinería de Dos Bocas en el presupuesto 2023, sumando un total de 136 mil millones de pesos adicionales al proyecto. Este complejo energético, que se encuentra en el municipio de Paraíso, Tabasco, ha estado en el centro de la atención desde su anuncio debido a su importancia estratégica para la autosuficiencia energética de México y su alto costo de construcción.
Originalmente, el proyecto había sido presupuestado en cerca de 8 mil millones de dólares, pero con estas adiciones, el costo ha aumentado considerablemente, generando preocupaciones entre los críticos sobre la viabilidad económica y financiera del mismo. A pesar de esto, las autoridades del gobierno insisten en que la inversión es necesaria para garantizar el suministro constante de combustibles en el país.
“Nuestro objetivo principal es dejar de depender de las importaciones de gasolina y diesel, y por ello, Dos Bocas es un pilar fundamental en nuestra estrategia energética”, explicó un funcionario de la Secretaría de Energía.
El aumento en el presupuesto también se atribuye a la inflación y al alza de los precios de los materiales de construcción, que han impactado a proyectos de infraestructura en todo el mundo. Aun así, las explicaciones no han calmado a todos los críticos. Algunos expertos en energía argumentan que el dinero destinado a Dos Bocas podría haberse utilizado de manera más eficiente en inversiones en energías renovables, dado el creciente desafío del cambio climático.
Por su parte, el secretario de Hacienda defendió la asignación presupuestaria, recalcando que, a largo plazo, Dos Bocas contribuirá significativamente al desarrollo económico de la región y al fortalecimiento del sector energético nacional.
La discusión en torno al costo y la utilidad de la refinería de Dos Bocas sigue siendo un tema candente en los círculos económicos y políticos, y será una cuestión a seguir de cerca mientras el proyecto avanza hacia su finalización y operación esperada.