Expertos en el sector energético han manifestado su preocupación sobre la manera en que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) está operando, e instan a una vigilancia más rigurosa de sus prácticas. Esto surge en un contexto donde las decisiones de la CFE tienen un impacto significativo en el mercado eléctrico, y existe una necesidad imperiosa de una regulación más transparente y eficiente.

Ricardo González, analista de energía, expresó que la falta de supervisión adecuada podría llevar a ineficiencias y posibles irregularidades en las operaciones de la CFE. Este aspecto no solo afecta la competencia en el sector, sino que también podría tener repercusiones en las tarifas para los consumidores. La preocupación central es que sin un control adecuado, la CFE podría tomar decisiones que no necesariamente maximicen el bienestar social o económico.

Además, Ana López, investigadora de un centro de estudios económicos, enfatizó la importancia de que las operaciones de la CFE se realicen bajo un marco de gobernanza corporativa que priorice la transparencia y la rendición de cuentas. Según López, este factor es crítico para garantizar que la paraestatal cumpla con sus objetivos sin comprometer el desarrollo sostenible del sector energético mexicano.

En este sentido, se ha destacado la necesidad de implementar medidas que fortalezcan la regulación y supervisión de la CFE. Entre las propuestas se encuentra la creación de un organismo autónomo que pueda evaluar de manera imparcial sus decisiones y su impacto en el mercado. Tal organismo podría ayudar a identificar áreas de mejora y fomentar una cultura de eficiencia y responsabilidad dentro de la compañía.

La discusión sobre el futuro de la CFE y su operación continúa siendo un tema central en el debate público, ya que de ello depende no solo la estabilidad del sistema eléctrico, sino también la confianza de inversionistas y consumidores en un entorno económico cada vez más desafiante.