El desgaste laboral se ha convertido en un problema creciente en México, afectando a una amplia mayoría de los trabajadores. Según un estudio reciente, el 75% de los empleados en el país reportan experimentar algún grado de agotamiento debido a la presión y el estrés en sus lugares de trabajo. Este fenómeno, conocido como “burnout”, ha suscitado preocupación tanto en sectores económicos como en el ámbito de la salud pública, ya que impacta directamente en la productividad y el bienestar personal.
Expertos en psicología ocupacional señalan que factores como las largas jornadas laborales, la falta de reconocimiento y un deficiente equilibrio entre el trabajo y la vida personal son los principales contribuyentes al agotamiento mental y físico. En muchos casos, los trabajadores sienten que sus cuerpos y mentes están al límite, lo que puede ocasionar problemas más serios de salud si no se aborda adecuadamente.
“La cultura laboral en México tradicionalmente ha priorizado la productividad sobre el bienestar del empleado, lo cual es contraproducente a largo plazo”, explica María González, especialista en recursos humanos.
Además, el trabajo remoto, que se popularizó durante la pandemia de COVID-19, si bien ha ofrecido flexibilidad, también ha desenfocado las líneas entre el tiempo laboral y personal, exacerbando el problema del desgaste. En muchos casos, los empleados se sienten obligados a permanecer siempre conectados, lo que aumenta los niveles de estrés.
Para contrarrestar este problema, las empresas están comenzando a implementar programas de bienestar organizacional que incluyen asesoramiento psicológico, talleres de manejo del estrés y la promoción de una cultura de respeto a los horarios personales. Sin embargo, es crucial que estas medidas sean adoptadas de manera efectiva para que generen un cambio real en el entorno laboral.
Es imperativo que tanto el gobierno como el sector privado tomen medidas proactivas para abordar el desgaste laboral. Sólo a través de un enfoque integral se podrá proteger la salud de los trabajadores y fomentar un ambiente de trabajo saludable y productivo.