La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) ha propuesto un incremento del 12% en el salario mínimo para el próximo año, como parte de sus esfuerzos por mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores en México. Esta iniciativa busca reducir la brecha salarial y avanzar hacia un salario digno que satisfaga las necesidades básicas de las familias mexicanas.

Coparmex ha destacado que el aumento del salario mínimo debería ser acompañado por políticas integrales que impulsen la productividad y competitividad de las empresas. La organización empresarial enfatizó la importancia de un crecimiento económico sostenible que no afecte la inflación ni impacte negativamente en la creación de empleos.

“El aumento del salario mínimo no solo mejorará las condiciones de vida de millones de trabajadores, sino que también fortalecerá la economía interna al aumentar el consumo”, afirmó José Medina Mora, presidente de Coparmex.

La propuesta del 12% es superior al incremento del 4% que se registró a nivel mundial durante este año, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). No obstante, Coparmex considera que el aumento es necesario para continuar con el proceso de recuperación económica que el país ha experimentado tras las afectaciones de la pandemia.

El debate sobre el aumento del salario mínimo ha generado diversas opiniones entre los distintos sectores económicos. Mientras que algunos empresarios apoyan la medida como una forma de mejorar la calidad de vida de los trabajadores, otros expresan sus preocupaciones sobre los posibles efectos inflacionarios y el impacto en las pequeñas y medianas empresas.

Por su parte, los sindicatos han mostrado su respaldo a la propuesta, argumentando que un salario mínimo más alto es esencial para enfrentar el aumento del costo de vida en México. Asimismo, instan al gobierno a considerar el enfoque de Coparmex y trabajar en conjunto con las partes interesadas para implementarlo de manera efectiva.

La discusión sobre el incremento del salario mínimo seguirá siendo un tema central en las negociaciones actuales, donde se buscará un equilibrio entre los intereses de los trabajadores y los desafíos económicos que enfrenta el país.